24 abr 2014

La pequeña vuelta de lo natural en antinatural, una necesidad congénita tornada en el vicio más vil.

Un detalle pequeño que se convierte en la más infernal y perniciosa de las carencias.

Una refrescante gota de agua que tenazmente pulveriza continentes...

Esa es la anatomía de los versos y la autopsia del autor.

Gloriosa miseria moral con la más sincera de las dedicatorias.

20 abr 2014

Hazme un muro que pueda escalar.

Hazme un muro para que pueda escapar.

Hazme un par de zapatos para que pueda huir.

Hazme un abrigo que me abrace en los días fríos.

Hazme un paraguas que me proteja de mis lágrimas.

Hazme una ventana que me mire a los ojos.

Hazme un corazón de oro para venderlo y así  comprar una vida.

Hazme un favor y párteme la cara...

13 abr 2014

Soy un estúpido.

¡No! En realidad, soy un gran estúpido.

Pensándolo bien, creo que soy el rey de los estúpidos.

El estúpido supremo.

¡No! En realidad, soy el Dios de los estúpidos.

¿Porqué uso tan dura descripción sobre mí mismo?

Te preguntas, ¿Porqué reclamo tales epitetos como adjetivos propios?

Es muy simple.

No quise seguir la dirección que la naturaleza me ha venido señalando.

Pasado el tiempo quise conducir a la naturaleza en mi dirección.

Ahora que lo entiendes, recuérdamelo.

De vez en cuando.
Siempre que haga falta.
Para que no se me olvide.

5 abr 2014

¿Para qué buscarte, si no vas a encontrarme?

¿Para qué ocultarme si no me temes?

¿Para qué hablamos si somos sordos?

¿Para qué hacer planes que el destino se encargará de cancelar?

¿Para qué me molesto en querer a otros si no tengo corazón y el reloj gira hacia atrás?

¿Para qué impresionarte si la sombra de esta ciudad es más interesante que yo?

¿Para qué decirte la verdad si otros tienen mentiras entretenidas que contar?

¿Para qué llorar si todos van a un carnaval?

¿Para qué escribir algo que no significa nada?

¿Para qué soñar si al final despertaremos?

¿Para qué velar si el cansancio nos vencerá?

¿Para qué recordar algo que de todos modos olvidaremos?

¿Para qué morir si todos viven?

¿Para qué permanecer en un lugar donde no somos bienvenidos?

¿Para qué vivir si todo murió?

¿Para qué hacer preguntas que no tienen respuesta?

2 abr 2014

Estado Latente de Inconsciencia - Tercera Parte

¿Soy real?
¿Estoy aquí?

Ciertamente no tengo una manera de sberlo con seguridad.

Que mi piel se voltee con la caricia del viento, no significa que el viento esté a mi alrededor...

Que mis ojos produzcan ocasionalmente riachuelos de nostalgia es prueba suficiente de que el mundo no me rodea. Está adentro. En mi interior.

Por eso es que a veces me cuesta trabajo desplazarme por los complejos pasillos y callejones.

Ya no me hacen falta más pruebas.
La respuesta ha venido a mí, transportada en un rayo de sol.
Recibida a los pies del último árbol de esta ciudad.

Soy un espejo.
Transparente.
Vacío.
Fiel.

Por eso a veces transformo las cosas en algo comprensible.
Todo.
Lo que veo.
Lo que pruebo.
Lo que siento.
Por eso transformo la vida en papel.

Es el propósito de mi existencia.
Es lo que me hace real.