Hoy es uno de esos días en los que el sol me lastima. Cuando la ciudad totalmente desnuda es incapaz de encubrir su vejación.
Bienvenido a mi palacio de cartón, te presento a mis concubinas, María y Magdalena. Esta es tu casa, ponte a gusto. El cirujano vendrá pronto y te extirpará el egoísmo... dudo que sepas lo valioso que eres.
No imaginaba que un callejón fuera tan acogedor e íntimo.
Los colores desaparecen. Por un momento parece que finalmente encontré a Dios.
Otro seguidor de Ícaro intenta tocar el sol, pero ha olvidado sus alas.