29 nov 2016

Mi último deseo me concedió una estrella fugaz. Evanescente. Intrusa. Frívola.

Vestigios de vidas pasadas. La farsa de vidas futuras. Caricaturas distorsionadas del héroe que no me puede salvar.

El mar sube a socorrer la isla cada vez que la luna con su vanidoso reflejo quema la Bahía.

¿Puede acaso el alma recordar lo que las bestias no han sentido?

Ni siquiera mi querida estrella fugaz conoce la respuesta.

7 nov 2016

El hombrecito en la casa de muñecas

Jamás he sido exigente.
Jamás tuve un sueño.
Excepto cuando Tú así lo querías.
Inmóvil. Mudo. Inerte.

Vil. Fabricado.
Capricho.
Abominación.

Soy el jueguete del universo.
A merced de mil alimañas y astros.
El calendario es un verdugo que muda de piel. Impredecible. Indiferente.

¿De qué sirve tener manos si jamás han tocado?

¿De qué sirve un cuerpo si no me pertenece?

Soy el juguete del universo.
A merced de mil alimañas y astros.
Es la única vida que conozco.
Inerte. Inútil. Sumiso. Abusado.

Puedo ser lo que quieras, si no estuviera amontonado entre las víctimas de tu pequeño campo de batalla.

No me importa que me uses.
Un rato. Un día. Un año.
No me importa cuando me olvidas.

Después de todo existo para divertirte.
Aunque sea un instante.

¡Luna!
Te aburres con tanta facilidad.
No eres más que otra niña caprichosa.
Y yo tu prisionero en aquella olvidada casa de muñecas.

¿Volveremos a jugar algún día?

5 nov 2016

Le llaman Babel

Solo quería erigir una torre. 
Una señal. 

No te atrevas a juzgarme, soy mortal. 
El viento se llevó todos mis aviones de papel. 

Mientras que el reloj espera crucificado en una pared blasfema. 

Solo quería erigir una torre. 
Con ayuda. O sin Ella... Mientras tenga estas manos. 

No necesito de ningún dios que interfiera. 
No necesito que ningún dios venga a confundirnos. 

Mientras tenga estas manos. 
Construir. Destruir. Abusar. Proteger. 
Ultrajar. Amar. 

La luna es una moneda sin suerte. 
El sol jamás ha perdido una apuesta. 

Solo quería erigir una torre sobre el manantial. 

Si quieres entrar al cielo, tendrás que probar todas las cerraduras.

2 oct 2016

Naufragio en La Orilla

Desde que la estrella polar se apagó, cualquier osa menor indica el norte. 

No me interesa cuántos mares surcaste. 

Quiero naufragar siguiendo esos faros que sé con plena certeza me desviarán de curso. 

La pícara brisa se vuelve a burlar de ti marinero. 

Abandona la cubierta. 

¿Hasta cuándo rechazarás la hospitalidad de los tiburones? 

No hagas esperar a las sirenas. 

Cualquier noche es buena para naufragar.

16 jul 2016

Amando a Judas

Tarde o temprano te ahogas en el bosque.
En este promiscuo mar de oscuridad y violencia.

No te molestes en mirar el cielo, los ojos de Dios no logran ver este lugar. Tenemos todo el abismo para nosotros querido.

Acércate.

Escoge si quieres invadir, o ser invadido.
No es demasiado tarde.
Pelea, pequeño.
¿No es algo pronto para desistir?
Ríndete.

Respira. Profundo.
El tiempo no es problema.
Tengo planes para tí.

Acércate.

Escoge una mano.
Equivocate.
Solo te dejaré hacerlo una vez.

¿No es algo pronto para desistir?
Pelea, pequeño.
Confórmate.

Quiero perdeme en el olor de tu ferocidad.
El bosque nos hará compañía. Este promiscuo mundo de miserables placeres y desamparo. Silencio. Quieto.  
Vil. Inmaculado. Exquisito.

Hasta que el sol venga a confundirnos.
Nos hemos encontrado.
¿Quieres arruinar el momento?
¿No es algo pronto para desistir?

Escoge si quieres callar.
Las raíces tienen oídos.
Escoge mancillar la pureza del silencio.
Sólo tú puedes palpar las entrañas de la tierra.

Nada estará bien.
Ríndete.

Confróntame.

Mientras yo camine contigo.
¿No lo habrás olvidado verdad?
Tú me diste nombre el día que te engendré.

No me obligues a empeorar las cosas.
Estamos a mano pequeño.

Acércate.

25 jun 2016

La balada del ángel triste

Hace 5 minutos conocí un ángel.
Su túnica andrajosa recogía la inmundicia de la ciudad.

Me miró a los ojos y dijo que fuimos creados el mismo día.

Hace 5 minutos conocí un ángel.
Su llanto enjuagaba el miserable asfalto.

Sus alas marchitas eran algo difícil de ver.

Hace 5 minutos conocí un ángel.
Me miró a los ojos y me dijo que tuviera fe en lo desconocido.

No cortes tus plumas.
Fuimos creados el mismo día.
Ten fe en lo desconocido y volarás.

Hace 5 minutos conocí un ángel.
Su espíritu ya no cabe en el cielo.

22 may 2016

22:05:16

¿Cómo puedes llamar espacio a la separación forzada de dos piezas que deben ir juntas?

¿Acaso eres idiota?
¿No tienes acaso alma?

No es más que egoísmo disfrazado de respeto. Crueldad. Vil crueldad.

Felicidades querido.
Acabas de cometer el único y más grande pecado imperdonable que se puede cometer bajo el sol.

Aunque seas una parte de mí, te odio.
No quiero verte. No quiero olerte.
Eres demasiado desagradable, incluso para mí.

No hay más remedio.
Compartimos el mismo espejo.

Acércate.
Un poco más, quiero que rompas esta jaula de cristal que me obliga a ser tú.
Ya no lo soporto, y tú tampoco, aunque ambos sabemos bien que no te importa lo suficiente como para que te disguste.

No eres fuerte.
Ni siquiera intentaste ser débil.

¿Cómo puedes llamar espacio a la separación forzada de dos piezas que deben ir juntas?

El bocado insulso

Esto es un error. Podría llegar a lamentarlo, o quizá no. Jamás lo sabré.

Si tan solo hubiera tenido el valor.
Si hubiera estado lo bastante loco.

¿Porqué rayos te fui a buscar con esa estúpida armadura? Es demasiado fácil ensillar excusas. Fui demasiado descortés al presentarme en otra forma que no fuera la mía.

Nunca es tarde.
Es lo que dicen los ilusos.
Quienes al igual que yo confiamos en un reloj liciado. Incapaz de avanzar. Inútil.

No debí haberme burlado de esa forma.
Para ser un dragón fuiste demasiado magnánimo cariño. Muchos seres inferiores no lo hubieran tolerado.

Lamento que haya sido en vano.
La armadura. La virtud. Todo.

¿Porqué no me destruiste?
Eres tan superior a mí.
Siempre admiraré tu grandeza.

Aunque ya no sea digno.
Hasta los dioses pierden la paciencia.

Morir en tu boca sería un privilegio.
Desaparecer. Consumido por tu aliento.
Libertad. Sosiego. Calidez.

Lamento haber sido el bocado insulso.

7 may 2016

Todos te maldicen porque piensan que les arrebataste algo.

Yo no.

Tú me maldices porque no me llevé nada.
Desprecié tu generosidad.

Iluso.
Arrogante.

Yo me maldigo por ofenderte tantas veces; ojalá hubiera sabido que vendrías.

Ahora es demasiado tarde.
El último tren acaba de partir.
No necesito reloj para saberlo.

Se acabó el juego.
Ya has tomado suficientes formas.
Han pasado bastantes vidas.

Sin embargo yo sigo aquí.

Debí haber bajado del barco y caminar sobre las aguas cuando me invitaste.

¿Porqué diablos salí de la fila?

He perdido mi turno.

4 may 2016

La Ciudad tiene sed

¿Cómo sabes cuánto tiempo tiene que pasar para que sea demasiado tarde?

¿Cómo puedes si quiera saber cuándo es demasiado pronto?

Sé que no es un buen momento.
Ahora no.

¿Olvidaste acaso que han robado mi reloj? No tengo tiempo desde entonces.

No sé diferenciar el pasado del futuro.
Ayer es parte de hoy, desde que confío en un espejo roto.

¿Cómo sabes cuánto tiempo tiene que pasar para que sea demasiado tarde?

La ciudad tiene sed.

La lluvia no puede lavar la sangre de los dioses sufrientes que murieron por amor de sí mismos.

Sé que no es un buen momento.
Nunca lo será.

El dragón sigue hambriento.
No queda nada, solo cenizas y remordimiento.

La ciudad tiene sed.
Los ríos se han secado.
Entre cristales rotos.

El sol se esconde de la Luna hasta el próximo eclipse mientras los cangrejos salen de la arena.

29 abr 2016

4/29

¿Qué se debe hacer cuando las palabras se acaban?

Tantas caras. Tanto tiempo.
Demasiada confusión.
Nos aburrimos.

Se acabó.

El combustible.
El espacio.
Las razones.
El tiempo.
Las palabras.

El mundo.

¿Qué se debe hacer cuando se acaban las palabras?

¿Cómo esperas que sepa la duración de un instante? Un silencio, ¿quizás?
Un parpadeo. Un disparo, ¿tal vez?

El viento se lleva las palabras.

El tiempo se lleva las acciones.

¿Cómo esperas que sepa el valor de las cosas que no he perdido? Una caricia.
Un recuerdo. Una oportunidad, ¿quizás?

¿Qué se debe hacer cuando se acaban las acciones?

Morir.

Aprender.

Es lo mismo.

No tiene importancia.
Ya es tarde.

19 ene 2016

Una vez más el autobús me abrió sus puertas y esperó.
Invitación.
Coincidencia.

Eso no es importante ahora mismo.

En otra ocasión fue un taxi, pero impaciente se fue al ver mi equipaje.
No debí ser tan descortés.

Suelo olvidar que las valijas no pueden viajar. No saben cómo.

Por las noches oigo el lamento de los trenes que vienen y van sin mí. Ese triste sonido que no me deja dormir ni soñar.

Una vez más olvidé que el equipaje estorba y que los aviones vacíos no pueden volar.

Olvidé lo fácil que es empacar excusas.