28 mar 2014

Hay momentos cuando lo único que nos mantiene vivos es aquello que bastaría para matarnos.

Hay momentos cuando sacar la foto de la muerte del compartimento secreto de nuestra billetera es lo único que nos da fuerza para seguir viviendo.

El resto del tiempo nos dejamos matar de la comodidad, la salud y nos colocamos el nudo corredizo de la confianza para colgar pacíficmente de una cuerda fabricada con las mejores fibras de nuestra propia realización.

No hay comentarios:

Publicar un comentario